Ciencia, ¿Ángel o diablo?
El uso que le damos a la ciencia
En
la Prehistoria el hombre vivía en plena naturaleza, refugiándose en cuevas,
cazando animales y recolectando frutos para alimentarse. Hoy en día se puede
decir que vivimos con las necesidades básicas cubiertas ( Desgraciadamente solo
las personas que vivimos en el primer mundo)
, y todo esto
empezó con el descubrimiento del fuego, hace 790.000 años.
El hombre de
hoy usa en su día a día numerosas contribuciones tecnológicas: el ascensor, el
metro, el automóvil, el reloj, el teléfono, etc. La tecnología invade toda
la actividad industrial y participa profundamente en cualquier tipo de
actividad humana. Hemos construido ciudades espléndidas, inventado ordenadores
y móviles con los que podemos comunicarnos al instante a miles de kilómetros de
distancia. En este sentido, la ciencia es lo mejor que nos ha pasado.
La pregunta
que podríamos plantearnos ahora es si la ciencia es buena o mala? Pero, ¿podemos
plantear esta pregunta?... La ciencia, la tecnología son buenas siempre, lo que
puede ser malo es el uso indebido que hagamos de ellas. La ética y los buenos
hábitos son los que nos debieran guiar.
Las ventajas
de la ciencia son que hemos conseguido desarrollar vehículos y formas de
comunicación cada vez mejores, industrias que producen la cantidades enormes de
cosas, explorar y descubrir nuevos territorios, curar a personas con
enfermedades cada vez más raras y complicadas, y muchas cosas más, pero también
hemos construido armas nucleares que pueden destruir la Tierra varias veces,
contaminamos la atmósfera, el agua y la tierra y explotamos los recursos
demasiado rápido.
Cuando
hablamos de ciencia, hablamos de las dos caras de una misma moneda. Lo bueno y lo
malo van de la mano siempre inevitablemente. Ángel y diablo unidos en el ser
humano, no en la ciencia, nos ha llevado a ser al mismo tiempo salvadores y
destructores de "Tierra" y de nosotros mismos.
Seamos pues
conscientes y hagamos un buen uso de las ventajas que nos proporciona la
evolución en sí misma.